COPRED hace un llamado para garantizar la no discriminación en el ámbito laboral
Ciudad de México a, 01 de mayo de 2025
Pronunciamiento 011
En esta conmemoración del Día Internacional del Trabajo, desde el Consejo para Prevenir y Eliminar la Discriminación de la Ciudad de México (COPRED) hacemos un llamado a todas las instituciones públicas y privadas, empleadoras y empleadores, para que asuman un compromiso real con la construcción de espacios laborales libres de discriminación y violencia, que garanticen el acceso igualitario al trabajo y la permanencia en él sin prejuicios ni estigmas.
La discriminación laboral limita el acceso, permanencia y desarrollo de muchas personas en el empleo, especialmente de mujeres, personas con discapacidad, personas indígenas y afrodescendientes, personas LGBTIQ+, personas con condiciones de salud específicas, y de quienes enfrentan múltiples formas de exclusión. Estas barreras afectan directamente su autonomía económica, su bienestar y el ejercicio pleno de sus derechos.
Implementar políticas de Diversidad e Inclusión Laboral, promover la igualdad de oportunidades y eliminar prácticas discriminatorias no solo es una obligación legal, sino también una condición indispensable para lograr un desarrollo justo y sostenible.
Cada 1º de mayo se conmemora la lucha histórica de las personas trabajadoras por el reconocimiento y respeto de sus derechos laborales. Esta fecha recuerda las conquistas logradas a lo largo de los años, como la jornada laboral de ocho horas, la indemnización por accidentes de trabajo, la prohibición del trabajo infantil y la implementación de condiciones laborales más seguras y dignas.
En México, la lucha de las personas trabajadoras se ha consolidado en normativas como el establecimiento del Artículo 123 en la Constitución de los Estados Unidos Mexicanos (CPEUM), el cual establece que “Toda persona tiene derecho al trabajo digno y socialmente útil” y en la Ley Federal del Trabajo (LFT), donde se define que:
Se entiende por trabajo digno o decente aquél en el que se respeta plenamente la dignidad humana del trabajador; no existe discriminación por origen étnico o nacional, género, edad, discapacidad, condición social, condiciones de salud, religión, condición migratoria, opiniones, preferencias sexuales o estado civil; se tiene acceso a la seguridad social y se percibe un salario remunerador; se recibe capacitación continua para el incremento de la productividad con beneficios compartidos, y se cuenta con condiciones óptimas de seguridad e higiene para prevenir riesgos de trabajo.
En razón de lo anterior, queda explícito que un trabajo digno o decente es aquel que no discrimina, donde se tiene acceso al derecho humano al trabajo con todas las condiciones de la ley sin importar la identidad ni el contexto de las personas. Un trabajo digno se debe traducir a un espacio laboral libre de prejuicios y estereotipos, donde las personas se sientan seguras y libres.
Si bien las disposiciones a nivel internacional, nacional y local son claras al expresar la obligatoriedad de crear espacios de trabajos seguros, libres de toda forma de discriminación y violencia, la realidad sigue siendo otra.
Datos del Consejo exponen que, desde su creación hace 14 años, el trabajo es el espacio donde más se discrimina, 7 de cada 10 casos que llegaron al Consejo entre 2013 y 2022 se relacionaron con actos discriminatorios en el ámbito laboral. Los motivos principales son discriminación por embarazo y condición de salud, seguidos por casos relacionados con el género y la discriminación laboral LGBTIQ+.
Asimismo, la Encuesta sobre Discriminación en la Ciudad de México (EDIS), en su ejercicio 2013, 2017 y 2021 expone que personas que viven y transitan en la urbe mencionan el trabajo como uno de los principales lugares donde se vive la discriminación, destacando que en 2021 ocupó el primer lugar con un 36.8%.
El COPRED reitera su compromiso para combatir la discriminación en el ámbito laboral a través de la atención oportuna a casos de discriminación y de la prevención con la plataforma del Gran Acuerdo por el Trato Igualitario (GATI), donde se trabaja de la mano con empresas que están implementando acciones de inclusión laboral en sus espacios.
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